viernes, 23 de abril de 2010

JIMI HENDRIX: THE MAN, THE MAGIC,THE TRUTH por Sharon Lawrence

“It’s all about tones. You hear the sound in your head or your heart, and you send a message to your fingers.” Jimi Hendrix



Parece que últimamente solo leo biografías de guitarristas muertos o al menos son las que me despiertan el suficiente interés como para reseñarlas en el blog.

Efectivamente, después de Duane y Rory ahora le toca a Jimi. El que es unánimemente considerado el mejor guitarrista de todos los tiempos, el que, sin duda, cambió el concepto de la guitarra eléctrica.

El libro de Sharon Lawrence no es una biografía al uso. Sharon fue amiga y confidente de Hendrix en sus años de gloria. Una de las pocas personas que debido a su experiencia con la fama y los famosos debido a su profesión, no se vió cegada por el personaje público y encontró a la persona real que estaba debajo de los oropeles y lejos de los focos.

Así, con ella, tenemos el privilegio de compartir muchas conversaciones y momentos muy sinceros de Jimi y conseguimos entender porqué al final el personaje y la explotación que del mismo hicieron unos y otros, mataron a la persona.

Además es bastante triste descubrir que el tiempo no ha detenido esa manipulación salvaje de Jimi. Su propio padre y sobre todo su supuesta hermana, supuesta porque no tenia ninguna vinculación biológica con él, era la hija de la segunda esposa de Al Hendrix, litigaron durante años para conseguir los derechos de las grabaciones de Jimi y después se dedicaron a exprimirlas inmisericordemente, con ediciones y reediciones que posiblemente Jimi nunca hubiera aprobado, dada su brutal autoexigencia y su búsqueda incesante de la perfección en su música.

Cuando vi las reediciones apadrinadas por Experience Hendrix y la Familia Hendrix yo pensé que era algo bueno. Ahora sé la verdad y casi me lamento de muchas de las compras que he hecho para engordar los bolsillos de esa señora. A pesar de todo, la música de Jimi sigue ahí, brillando en todo su esplendor cuando en breve se cumplirán 40 años de su muerte.

Lectura muy recomendable. Eso sí, en inglés.

Y de propina esta entrevista con Sharon Lawrence sobre el libro y su relación con Jimi.

miércoles, 7 de abril de 2010

RIDING SHOTGUN by Gerry McAvoy y Pete Chrisp


Riding Shotgun

Esta expresión se usaba, según parece, para referirse al guardia armado de escopeta (shotgun) que iba sentado al lado del conductor en las diligencias del Far West. Por extensión ha acabado por referirse al que nosotros diríamos que "va de copiloto", es decir sentado al lado del conductor.

Por eso el título del libro es de lo más apropiado. Gerry McAvoy fue el fiel copiloto de Rory Gallagher durante casi toda su carrera, por su banda pasaron otros músicos, pero la presencia de Gerry fue constante casi hasta el final. Y por lo tanto las memorias de Gerry son una fiel crónica de sus vivencias junto al gran Rory.

Cuando me puse a buscar una biografía de Gallagher y me decidí por este libro no pude haber acertado mejor. Quizá la única persona que estuvo más cerca de Rory durante toda su vida sea su hermano Donal, que esperemos algún día decida hacerlo mientras es el más diligente conservador de su legado. Pero tras él sin duda Mr McAvoy.

El libro es una delicia. Contado con agilidad y sin tapujos, nos hace revivir paso a paso toda la carrera de Gerry desde su Belfast natal, nos enseña la realidad de la escena irlandesa en los 60 con pinceladas de la cruda situación política y nos hace descubrir a un Rory Gallagher no solo músico sino persona. Una persona complicada a la que su educación y su tremenda timidez le llevó a vivir su vida y su carrera de una manera muy particular.

Como siempre me pasa cuando leo sobre un músico, esto me ha hecho sumergirme otra vez en la portentosa discografía de Rory Gallagher, un guitarrista desgraciadamente no tan conocido y alabado como otros, pero que no tiene nada que envidiar a los grandes nombres que siempre se mencionan y en mi opinión, en muchos casos, los supera.

Rory es un icono de la música irlandesa y junto a Philip Lynott y Van Morrison para mi los más grandes que han salido de la isla.



Además con él tengo algo especial. Aquel concierto del 3 de Marzo de 1979 en el Pabellón, con 17 años, mientras todo el país estaba pendiente del resultado de las segundas elecciones democráticas fue para mi un recuerdo imborrable. Un concierto de los que marcan para toda una vida. Y aquella botella de Florentino que nos encontramos entera a la salida y que nos bebimos mientrs íbamos, felices, andando a casa.